Las obras de rehabilitación de un edificio en la plaza de la Llana, 23, han permitido documentar restos arqueológicos de diferentes cronologías. Desde restos de cimentaciones de una casa medieval del siglo XIV y las remodelaciones posteriores, que incluyen un recinto con algún uso comercial en el siglo XVII o anterior y, finalmente, una fábrica de chocolate en el siglo XIX. En marzo de 2023 se iniciaron los trabajos de control arqueológico.
Los trabajos de arqueología vertical realizados hasta el momento han permitido documentar muros con arcos y puertas atribuibles a un palacete gótico del siglo XIV que, según fondos documentales, habría sido propiedad de la Pía Almoina. Siguiendo la información documental, durante el siglo XV, la casa se habría convertido en una posada: el Hostal de Sant Pere, que habría dejado de funcionar durante el siglo XVI.
La fábrica de chocolate Guardia
No fue hasta el s.XIX cuando el espacio fue ocupado por un obrador donde se elaboraba chocolate. De hecho, en el Almanaque de la Exposición Universal de 1888, aparece la fábrica referenciada en la dirección de plaza de la Llana, 23 como: Guardia (Clemente). Chocolates y pastillaje.
La intervención arqueológica ha permitido recuperar elementos relacionados con este espacio productivo, como las placas de plomo que se habrían usado para elaborar las etiquetas de los chocolates donde se especifica que en la fábrica de chocolate de Clemente Guardia «se hacen moliendas particulares».
Los trabajos continúan en la excavación arqueológica del subsuelo y, al mismo tiempo, se realiza el estudio de los paramentos del inmueble con el fin de seguir documentando los diferentes períodos y conocer la evolución del edificio. Los restos encontrados, una vez documentados, se trasladarán a las instalaciones del ICUB en la Zona Franca y queda abierta la posibilidad de la conservación de alguna pieza in situ.
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