La Balmesina es, seguramente, la gran pionera de la pizza gourmet en Barcelona (y, oficialmente, una de las mejores pizzerías del mundo). Una de las primeras en experimentar con masa madre, con productos italianos y locales de calidad y con pizzas de larga fermentación que dieran como resultado ese borde inflado y crujiente y esa masa con la textura justa como para aguantar el relleno y doblarse a la vez, ofreciendo una mordida suave y satisfactoria al mismo tiempo.
Tras la Balmesina vino Gina la Balmesina, misma pizzería pero con un concepto algo más casual. Y como las familias crecen, ahora ha llegado la Focacceria Balmesina, que se suma a la oleada de focaccerias de Barcelona para ofrecer el bocadillo icónico de Italia con las característicias que ya nos estamos acostumbrando a ver: focaccias esponjosas, mostradores llenos de embutidos traídos directos de Italia que te hacen salivar y barras altas para disfrutar de esta comida italiana como en el país de la bota, al paso.
Masa artesanal, embutidos sostenibles y vinos naturales: así es una focacceria ética
Las focaccias ya las conocéis: el bocadilo italiano de moda se hace con masa esponjosa y crujiente, embutidos italianos que te hacen salivar y, en este caso, vinos naturales y todos los productos, hasta las harinas, de producción ética y ecológica.
Esa es una de las formas de diferenciar a la Focacceria Balmesina de otras: las harinas de la masa son las misas harinas ecológicas que usan en sus pizzerías. Los embutidos vienen de pequeños productores sostenibles italianos o, en el caso de la panceta de cerdo que usan para hacer la porchetta, de Cal Rovira, productor catalán conocido por la sostenibilidad en su trato a los animales.
Lo mismo con los vinos: son todos de producción ecológica, sumándose a una moda que sí, es una tendencia, pero que también asegura una relación más ética y humana con la producción de vinos.
¿Qué hay en la carta?
Algunas de las focaccias que hemos probado son la Porchetta: con porchetta casera, mayonesa, mostaza y encurtidos; la de speck con crema de setas o la de parmigiana, con una parmesana de berenjena y parmigiano madurado por 24 meses.
Entre sus vinos naturales probamos el Clarete, pero además tienen cervezas artesanas y refrescos caseros como limonada e iced tea, junto con el agua socialmente responsable de Aura.
El local, por cierto, está en la calle Maquinista, justo detrás del Mercat de la Barceloneta, o sea directa en el camino hacia la playa, y por tanto, perfecta para un bocadillo playero el próximo verano.
Focaccias gratis y 2×1 toda la semana de la inauguración
Por cierto, para inaugurar el local, la Focacceria Balmesina regalará el 28 de noviembre, a partir de las 18h. focaccias y vinos a todo el que se acerque, y durante toda la semana, hasta el jueves, hará un dos por uno de sus bocadillos, para que nadie se quede sin probar.
📍Carrer de la Maquinista, 13, Ciutat Vella, 08003 Barcelona
💸Focaccias entre 9-10€