¡Atención! En 2022 todos los de este artículo serán superados por la Sagrada Familia.
Vale, puede que no tengamos los rascacielos más altos que vayas a ver en tu vida. De hecho, estamos casi literalmente a kilómetros de las megaconstrucciones que se mueven hoy en día por Oriente Próximo. Que, visto desde otro lado, ni tan mal, porque a ver quién duerme tranquilo bajo la sombra de un mastodonte de más de un kilómetro.
Sin embargo, aunque sean pequeñitos, nuestros rascacielos tienen un innegable encanto. Primero, por su estética; en algunos casos por la compañía; y por último, por qué no decirlo, porque son muy nuestros.
Estos son los ocho más altos de Barcelona (aunque como los tenemos muy parejos, los numeritos han salido un poco liosos).
Diagonal Zero Zero
No pasa desapercibido en el puerto por su inconfundible fachada, que parece sacada de otros tiempos. Son 110 metros los que tiene este armatoste de cemento y acero que aloja la sede catalana de Telefónica. Se acabó de construir en 2011 siguiendo los planos del arquitecto Enric Massip-Bosch.
Edificio Colón
Es el viejete de la lista. Se construyó en 1970 y por la época fue todo un boom, tanto que tuvo el honor de ser el primer edificio de Barcelona en superar los 100 metros de altura. Son en total 110 los metros que lo separan del suelo y su aire retro le da un toque que nos encanta. Este toque, por cierto, corre de la mano de los arquitectos Josep Anglada, Daniel Gelabert y Josep Ribas.
Torre Realia BCN y Hotel Porta Fira
Llamadas Torres Fira, a estas hermanas del skyline de Barcelona solo les separa un metro. Son 113 metros de altura los que tiene el Hotel Porta Fira (izquierda) por los 112 de la Torre Realia BCN (derecha). Están en Hospitalet de Llobregat y tienen como padre el mismo arquitecto (ya os habíamos avisado que eran familia). Se trata del japonés Toyo Ito, que vio nacer a sus queridas obras en el 2010 y 2009 respectivamente. No sabemos cuál será su ojito derecho pero curiosas son las dos un rato.
Habitat Sky
El Poblenou alberga uno de los edificios más futuristas de Barcelona, de España y probablemente de toda Europa. No decimos de todo el mundo porque a ver quién es el listo que reta a los arquitectos de Dubai. Son dos hoteles los que ocupan un rascacielos que parece más una nave espacial a punto de despegar el vuelo que cualquier otra cosa. Son 120 metros los que tiene la criatura diseñada por el francés Dominique Perrault.
Torre Agbar
¿Qué vamos a decir a estas alturas de la película de la Torre Agbar que no hayamos dicho ya? Son 144 metros sobre los que se eleva el tercer edificio más alto de Barcelona, y probablemente el más conocido de todos ellos fuera de la ciudad condal. El arquitecto que la firma es Jean Nouvel en colaboración con b720 Fermín Vázquez Arquitectos. Se inauguró en 2005 y parece que fue hace mucho más tiempo, porque es imposible hoy en día dibujar el cielo de Barcelona y olvidarse del «supositorio del 22@».
Torre Mapfre y Hotel Arts
Sí, sorprendentemente el rascacielos más alto de Barcelona no es uno, sino dos. Y además están pegados el uno al otro. Tienen 154 metros de altura y ambos se construyeron en 1992 con motivo de las Olimpiadas, el año mágico de Barcelona – a veces da la sensación de que antes de este año en Barcelona no existía nada-. La Torre Mapfre (que es un edificio de oficinas) la proyectaron los arquitectos Iñigo Ortiz y Enrique León mientras que el Hotel Arts lo diseñó la firma americana Skidmore, Owings & Merrill LLP (SOM).