Ropa, ropa y más ropa. Nos sobra la ropa. Por suerte o por desgracia, tenemos ropa para aburrir, y demasiadas veces olvidamos que la industria del textil es una de las más contaminantes del planeta. Según la ONU, la industria de la moda produce más emisiones de carbono que todos los vuelos y envíos marítimos internacionales juntos, con las consecuencias que ello tiene en el cambio climático y el calentamiento global.
Atacar el impacto ambiental que supone la industria de la moda y su desperdicio es uno de los grandes objetivos de la lucha contra el cambio climático, y por eso el Ayuntamiento de Barcelona ha puesto en marcha un servicio de recogida de ropa usada a domicilio que busca pasar del 11% de ropa reutilizada en la actualidad al 15% en 2022.
Según el Ayuntamiento el sector textil es una de las industrias con más impacto ambiental y climático: la cuarta en consumo de materias primas y agua, y la quinta en emisión de gases de efecto invernadero. Para combatirlo, el nuevo servicio permitirá donar ropa, complementos, calzado, toallas, sábanas o cortinas.
Para poder solicitarlo hay que llegar a un mínimo de 5 bolsas de basura de 60×54 cm o 3 de 68×70 cm, o 2 y 1, respectivamente, en caso de personas con movilidad reducida acreditada. La recogida la llevarán a cabo dos empresas de inserción laboral sin ánimo de lucro, de lunes a viernes, de 9.00 a 14.00 horas y de 15.00 a 19.00 horas (los sábados, solo por la mañana).
El servicio se enmarca en el Plan residuo cero Barcelona 2021-2027 y se añade a la red de 225 puntos y contenedores distribuidos por el espacio público, que en 2022 recogieron más de 2.500.000 kilogramos de ropa. De esta, un 59% se reutiliza en tiendas de segunda mano o se exporta a otros países, un 37 % no se puede reutilizar y se crean nuevas fibras a partir de los materiales y Un 4 % no se puede aprovechar.