Qué bonito es estar viviendo la edad de oro de la televisión catalana.
Ante los vanos esfuerzos y el importante presupuesto de Movistar por erigirse en principal productora de series en este país (hay alguna excepción como El día de mañana que sí que alcanza altas cotas de calidad), el talento de TV3. TV3 que, de un tiempo a esta parte, ha venido a saberse el Rey Midas de las series de tv: producción que tocan, producción convertida en oro.
La gran apuesta de esta temporada de TV3 es Si no t’hagués conegut, una adaptación de la obra de teatro escrita por Sergi Belbel, quien también escribe el guion de la serie.
La trama es la siguiente: “Eduardo, hombre de negocios, muy enamorado de su mujer Elisa, provoca involuntariamente una tragedia. Óscar y Clara, sus mejores amigos, intentan ayudarle infructuosamente. Para superar su trauma, Eduardo se introduce en un laberinto de pensamientos confusos y caóticos y consigue viajar hacia atrás en el tiempo. Su objetivo es reencontrar a Elisa viva e intentar, por todos los medios, evitar conocerla para, así, borrar la tragedia de su futura y traumática pérdida”. No sé por qué, pero algo me dice que muy mal se tiene que dar para que no acabemos llorando al acabar de verla.
Si no t’hagues conegut, producción de TV3 en colaboración de la productora Diagonal, sustituirá a La Catedral del Mar en la parrilla televisiva. Y su estreno es el 15 de octubre.
Cuando hablamos del éxito -nacional con vocación mayor- de TV3 nos referimos también a la noticia del mes pasado. Netflix con la chequera por delante para hacerse con Bienvenidos a la familia. Dirigida por Pau Freixas y Paco Caballero, el binomio que funcionó en Cites. Bienvenidos a la familia es una comedia negra que también ha gustado allá donde ha llegado.
Puede ser que esta etapa dorada se inaugurara con Pulseras Rojas. La serie de Albert Espinosa y Pau Freixas sorprendió a propios y a extraños (Steven Spielberg, dicen) y fue la sorpresa de la ficción española a principios de decenio.
Luego le tocó a Merlí. Un elenco que reúne a los actores más talentosos de la escena catalana, un guion magistralmente escrito y unos capítulos brillantemente dirigidos por Héctor Lozano fueron suficientes para encandilar primero a Cataluña, luego al resto de España y más tarde a Latinoamérica (en Argentina están enamorados de esta serie). Con Merlí, por cierto, convivió Citas, la serie de Pau Freixas que protagonizaba Eduardo Noriega y que le bastaron dos temporadas para enamorar a todo aquel que la vio.
Parece que TV3 más que en serio, va en serie. Bienvenidos a la edad de oro de la televisión catalana.