Los estudiantes de Catalunya se quieren sumar a las iniciativas solidarias con los afectados por la DANA de Valencia. Por eso, la Federación Nacional de Estudiantes de Cataluña (FNEC) ha convocado una huelga universitaria de cuatro días, del 6 al 11 de noviembre, con el objetivo de permitir que los estudiantes puedan desplazarse como voluntarios a las zonas afectadas por el temporal en la comunidad vecina.
La iniciativa busca liberar a los alumnos de actividades que cuenten para evaluación para que puedan participar en las tareas de rescate y ayuda en lo que, en el comunicado de la huelga se define como «la peor catástrofe humana y material de los Países Catalanes en décadas».
En su comunicado, la FNEC denuncia una «gestión completamente negligente y criminal» por parte de la Generalitat Valenciana y del Gobierno español. Los estudiantes acusan a las autoridades de falta de coordinación y previsión, lo que ha resultado en una población afectada «totalmente desatendida».
Las universidades apoyan la iniciativa
Desde la FNEC se informan de que están en conversaciones exitosas con los rectores universitarios para suspender las clases durante estos días.
De moment0, la Universidad Pompeu Fabra (UPF) ha acordado suspender la actividad docente evaluativa del 6 al 11 de noviembre para los estudiantes que se movilicen.
Por su parte, la Universidad de Barcelona (UB) y la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) adoptarán medidas similares, que serán comunicadas próximamente a los alumnos.
Finalmente, se espera que la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC) también se sume también a la iniciativa.
Huelga general de estudiantes contra la gestión de la catástrofe
Además de esta convocatoria, el SEPC (Sindicat d’Estudiants dels Països Catalans) ha convocado una huelga en solidaridad con la Comunidad Valenciana el 12 de noviembre en institutos y universidades.
En su comunicado, el SEPC explica que quiere poner en relieve como la DANA ha desencadenado una crisis social «que evidencia tanto la emergencia climática como la mala gestión del gobierno del PP en Valencia» que pone en evidencia el «negacionismo climático de los últimos gobiernos».