
«Baixant de la Font del Gat, una noia, una noia. Baixant de la Font del Gat, una noia i un soldat!». Es muy difícil que cualquier catalán no reconozca enseguida el estribillo de esta canción popular que habla de una chica que baja de la Font del gat después de un romántico paseo por Montjuïc. Esta escena (ahora sin soldados, esperemos), volverá por fin a repetirse en Barcelona ya que la Font del Gat, el merendero más popular (y a la vez desconocido) de Barcelona ha reabierto sus puertas.
Lo ha hecho a través del Grup Confiteria, el grupo de restauración reconocido por su apuesta por locales históricos (Muy Buenas, Cafe Central, La Confitería…). Ellos han cogido este merendero del 1918 de 700 m² que gira en torno a un antiguo edificio modernista diseñado por el arquitecto Puig i Cadafalch, y lo han reabierto para convertirlo de nuevo en un espacio de encuentro popular para que los barceloneses se junten en torno a la música y la comida.
Cómo recuperar las fontadas

Hace no tanto era habitual para los barceloneses celebrar las famosas “fontadas”, celebraciones populares alrededor de una fuente en las que familias y amigos subían a comer, beber, bailar y hacer fiesta entre los siglos XIX y XX. Estas fontades se hacían en las fuentes que manaban de Collserola y también de Motnjuïc. De ahí la canción de la Font del Gat.
Para hacerlo, un restaurante popular donde comer por unos 20 o 30 euros que busca ser, sorbe todo, un espacio cultural donde habrá eventos de miércoles a domingo, acompañados de tapas y comida a la brasa.
Los miércoles, la “Fontada Musical” ofrece conciertos en directo de todos los estilos, desde jazz hasta flamenco. Los jueves, cenas pop-up en los Sopars del Gat, siempre acompañados de buena música. Los viernes y sábados por la tarde, el jardín celebrará las “Fontadas de tarde” al aire libre, una propuesta pensada para disfrutar del atardecer con amigos, música y copas. Y al caer la noche, vuelve la música en directo o DJs , además de cenas al aire libre.
Finalmente, los fines de semana continúan con más celebraciones: sábados y domingos al mediodía, el “Vermut Musical” combina el aperitivo con música en directo y buen ambiente. Además, dos veces al mes, habrá sesiones de Cine al Aire Libre acompañadas de cócteles de autor.
Menú paella, brasa o bravas

Como en cualquier menú de finde, la brasa es protagonista, así que la Font del Gat tendrá menú de paella (22€ con entrantes) o espetos de carne (23€) para rematar el vermut. Además carta clásica con platos de toda la vida como croquetas, ensaladilla rusa o coca de recapte.
Además, vinos cuidados y otras sorpresas festivas como la pomada de Menorca o cócteles con café.
Por último, el remate: un club de petanca que quiere competir con los que haga falta y donde reunir a los mejores petanquistas de Barcelona.