Arrancamos con la primera entrega de nuestra serie Bueno, bonito y barato, un intento de mostrar algunas de las mejores propuestas gastronómicas de la ciudad resumidas en esta maravillosa tríada. Sobra decir que todos son buenos aunque esta categoría solo podamos otorgársela a uno de ellos. El barato, sin embargo, será más barato que el resto, y con el bonito trataremos de mostrar locales que, además de por la calidad de su oferta gastronómica, también destaquen por su propuesta estética.
En esta ocasión hemos elegido los bocadillos del mítico Bar Torpedo, del recién reformado Sants es Crema y del guerrillero bar El Atlas. Tomen nota.
Bueno: Bar Torpedo
El Bar Torpedo es uno de esos emblemas de la ciudad. De l’Eixample al mundo. Su propuesta es una carta sencilla de bocadillos a muy buen precio. Su hamburguesa es una de las mejores de la ciudad, pero no puedes dejar de probar su bocata de albóndigas o su sándwich de pastrami de lengua. Vinos y birras artesanas y algún entrante, como sus croquetas o sus bravas, completan la oferta de un local que contaba con la particularidad de cerrar a las 3:00 de la madrugada en tiempos precovid. Ojalá recuperen pronto este horario para trasnochadores.
💵 Entre 7,5 y 10,5 euros
📍 Carrer d’Aribau, 143
Bonito: Sants es Crema
Antes de la pandemia, Sants es Crema era un sofisticado local donde el comensal pagaba alrededor de 45 euros por cabeza. Ahora su carta no es menos sofisticada, pero sus platos, entre los que prima la comida a la brasa, se sirve ahora entre panes. Panes caseros de la máxima calidad, obviamente. Nosotros probamos una maravilla de pan de semillas con papada de cerdo crujiente y achiote que se deshacía en la boca. También tienen una birra diseñada especialmente para ellos por R115, la cervecera más pequeña de toda Catalunya.
💵 Entre 8,50 y 12,50 euros
📍 Carrer dels Comtes de Bell-Lloc, 118
Barato: El Atlas
Para la propuesta económica hemos elegido el bar El Atlas, una bocatería del Raval donde el bocadillo te sale a tres euros. Una oferta sin lujos pero con todo lo necesario para salir con el estómago lleno. Allí se dan cita locales, currelas y turistas en un espectáculo frenético de empaquetado de un bocata tras otro. La especialidad, el bocata de pinchitos morunos.
💵 Entre 2,5 y 3 euros
📍 Rambla del Raval, 30