Nos arriesgaremos a decir lo siguiente: hacer una tarta de queso mala es más difícil que hacer una tarta de queso aceptable. Tanto es así que se comercializan en los supermercados tartas de queso a medio hacer en la sección de repostería o incluso tartas ya hechas en la sección de lácteos refrigerados.
Pero conseguir hacer una muy buena tarta de queso ya requiere un poco más de mano, un poco más de técnica. Y si tienes el espíritu cocinillas de vacaciones, aquí te traemos algunas de las mejores cheesecakes de Barcelona para que solo tengas que sentarte a la mesa.
Lust
La cheesecake de Lust se ha pasado el juego: una tarta de queso hecha con tortilla de patata. Ya que su plato principal son las tortillas en pan de hamburguesa, decidieron hace poco unirse con Jon Cake (más abajo en esta lista) para hacer la primera cheesecake de tortilla. Espectacular.
📍Sardenya 164 / Emancipación 38.
Cheesecake BCN
Una cuenta de Instagram ha llamado recientemente nuestra atención. Y es que se ha convertido en una de las cheesecake del momento en Barcelona con un formato poco convencional: recetas caseras que solo se sirven a domicilio o directamente a restaurantes. Te hablamos de @Cheesecake.bcn, una cuenta que sirve tartas de queso de avellana, nutella, galletas Lotus y todas las fantasías dulces que puedas imaginar.
📍Pedidos online aquí.
Sugar Pastry
Tartas, cookies, brownies y mucha variedad. Pero en lo que aquí nos ocupa, las tartas de queso, diremos que en Sugar Pastry tienen siempre entre dos y tres tartas donde el queso es el protagonista, como su tarta de queso de cabra, de camembert o de brie trufado.
Pero también puedes probar algunos otros inventos nuevos como su tarta de queso con caramelo salado o la de queso y brownie. Y si te gustan las cookies estilo yankee vas a flipar.
📍 Carrer del Comte d’Urgell, 68
Fismuler
La de Fismuler es sin duda es una de las más impresionantes que hemos probado. Está hecha mezclando tres quesos diferentes: Idiazábal ahumado, Gorgonzola y queso crema. Un espectáculo. La porción vale 7 euros en carta aunque también la incluyen en algunos de sus menús, como este.
📍 Carrer Rec Comtal, 17
Jon Cake
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Lo de las tartas de Jon Cake ha sobrepasado ya los límites de lo imaginable. Jon, ingeniero aeronáutico, pasó por las cocinas de estrellas Michelin como El Celler de Can Roca o La Tasquería. Ahora hace estas tartas increíbles en tres tamaños diferentes y de diferentes sabores.
Jon nos cuenta que ya han usado 120 quesos diferentes para preparar sus tartas. Tiene siempre cinco tartas fijas disponibles (la clásica es la que más se vende), una cambia cada dos semanas y otras dos cambian a diario. Imposible aburrirse. ¡Larga vida a Jon Cake! Ahora, por cierto, también ha abierto Jon Cake & Wines, un local donde maridar sus míticas tartas con vinos de lo más top.
📍 Carrer dels Assaonadors, 29
Silan
Este increíble restaurante de cocina de Oriente Medio llamado Silan es uno de los grandes descubrimientos del pasado 2020. Todo está delicioso y su postre no iba a ser menos. Esta tarta de queso, con un toque de yogur, miel, frutos secos, galleta y frutas es redonda (aunque solo sea en sentido figurado). Pero aprovecha el viaje y pide cualquier otra cosa de su carta, como este kebab desmontado.
📍 Carrer d’Enric Granados, 38
La Güerita Mexicana
La tarta de este restaurante mexicano de Sant Antoni se merece un puesto en esta lista por lo innovador. Allí la preparan añadiendo maíz dulce a la mezcla y se acompaña con una mermelada de tamarindo en el emplatado. El resultado es un sabor curiosísimo que no esperas encontrar en un postre con este nombre, y una cremosidad redonda maridada con la acidez del tamarindo.
📍 Carrer de Manso, 53
La Fundente
La Fundente es otra casa de pasteles de las que nos alegramos de tener en la ciudad. La cremosidad de sus tartas de queso, igual de melosas en el centro que en el interior, la convierten en una de las casas que hay que visitar obligatoriamente en la ruta por los mejores cheesecakes de la ciudad.
📍 Carrer de Mallorca, 371
Funky Bakers
En el Borne, donde parece que se concentren todos los dulces de la ciudad, también está Funky Bakers, un rincón en pleno Passeig del Borne, muy cerca de Santa Maria del Mar, donde probar una tarta de queso artesanal.
Servida en un molde de madera individual (pero generoso) como si saliera directa de la vaquería, el cheesecake al estilo La Viña, uno de los grandes bares de pintxos de San Sebastián, una de las tierras madre del pastel de queso.
📍 Passeig del Born, 10