Cierra un local centenario de Sant Andreu… y encuentra sustituto enseguida. En un ejemplo de cómo funcionan las dinámicas de la ciudad, un local centenario de Barcelona ha pasado por todas las fases en menos de dos semanas.
El Versalles, un icono del barrio nacido en 1915, superviviente de una guerra civil y una pandemia, anunciaba hace una semana y media, 109 años después de haber abierto, que le tocaba bajar la persiana presionado por los 10.000 euros de alquiler mensuales que tenía que pagar.
Según avanzaba a Betevé el 31 de mayo el dueño del local, Carles Riera, el Versalles, en pleno gran de Sant Andreu, no podía hacer frente a este alquiler, a pesar de haber ido renovando su oferta para adecuarla a los vecinos y los cambios.
Con este cierre, el Versalles se suma a una larga lista de locales históricos que vienen cerrando en la ciudad. Desde zapaterías, herboristerías y otros bares y negocios hosteleros icónicos, la ciudad se queda, cada vez más, sin negocios antiguos.
Una nueva vida en forma de brasería
No obstante, el cierre del Versalles ha traído consigo la noticia de una reapertura en el mismo local. Ha sido del grupo La Madurada, un restaurante de carnes de Horta pensado para los vecinos del barrio, que abrirá en el mítico local de Sant Andreu una sucursal de su brasería.
La idea, según explican desde La Madurada, es «crear un restaurante de barrio y para el barrio, en ambos casos adaptándonos al local precedente, icono del barrio y la ciudad”, que abrirá en noviembre.
Así, el Versalles se reconvertirá en una brasería especializada en carnes con una propuesta complementaria de croquetas de carrillera, pan con tomate, steak tartar, carpaccios de solomillo de ternera o de picanha, también con algunas verduras y pescados a la brasa.