Quizás el veganismo pueda traer, todavía, alguna controversia, pero el vegetarianismo está plenamente instalado entre las dietas habituales. Nadie se sorprende cuando alguien no come carne, y los restaurantes con una oferta exclusivamente vegetariana han crecido exponencialmente en la ciudad. Del menú del mediodía a la alta gastronomía, cada vez más locales ofrecen una oferta exclusivamente verde, y es por eso que hace falta una lista como esta que nos ayude a encontrar los mejores restaurantes vegetarianos de la ciudad y ahondar en un tipo de cocina cuya complejidad ya hace tiempo que dejó de ser una sorpresa.
Tabla de contenidos
- 1. Bio Center, un clásico del centro
- 2. Rasoterra, delicadeza verde
- 3. Sésamo, la bella Italia vegetariana
- 4. Teresa Carles, cocina tradicional... vegetariana
- 5. Xavier Pellicer, la alta gastronomía color bosque
- 6. Fat Veggies, los fats que dejaron la carne
- 7. Cat Bar, el burguer bar vegano
- 8. Virens, cocina vegetariana con estrella Michelin
- 9. Pötstot
- 10. Mad Mad Vegan
1. Bio Center, un clásico del centro
En una lista de los mejores no pueden faltar los pioneros. Biocenter es uno de ellos, un local que lleva décadas con una oferta vegetariana en lo profundo del Raval, para los vegetarianos avant la lettre de la ciudad. Antes del covid ofrecía un buffet libre de ensaladas de primero y guisos de segundo que hacía temblar. Y aunque ahora el buffet ha desaparecido, su oferta sigue siendo de escándalo, con un menú a precio de risa y una carta que sigue siendo vegetariana, vegana y ovo vegetariana.
De su oferta destacan las hamburguesas verdes, sus platos con nombres como “la cabra siempre tira al monte” o “me tienes frita” -que son croquetas de puerro y queso brie- y también sus postres: el bizcocho de almendras con chocolate y la tarta de zanahoria merecen por sí solos un alto en el camino.
📍 C/ Pintor Fortuny, 25
2. Rasoterra, delicadeza verde
Un restaurante precioso en un lugar discreto y una manera de hacer también discreta, pero una cocina de quilates (vegetales). Rasoterra es otro de los pioneros de la cocina vegetariana en Barcelona. En su caso, no obstante, fueron de los primeros en elevar este tipo de gastronomía, convirtiéndola en una verdadera delicadeza sorprendente.
En pleno Gótico, ahí donde solo parece haber forraje para turista distraídos, Rasoterra ofrecen una carta corta, slow-food, con ingredientes de proximidad, vinos naturales y elaboraciones sorprendentes. Su menú de mediodía tiene precio de menú de mediodía pero da mucho más de lo que da un menú de mediodía, y el restaurante es, hace tiempo, un referente de la cocina vegana y vegetariana en la ciudad.
📍 C/ Palau, 5
3. Sésamo, la bella Italia vegetariana
Algo tienen los italianos con lo vegetal. Los dueños de Rasoterra son del país transalpino y el mismo fundador del movimiento slow-food, Carlo Petrini, también. En Sésamo los dueños también ofrecen una carta italo-vegetariana, si es que existe, en una esquina cuca en la frontera entre el Raval y Sant Antoni. De hecho, ya te dijimos que es uno de los restaurantes más populares del Raval y nos reafirmamos. En su carta hay provolone relleno, sus arancinis, su pasta rellena de queso de cabra y cebolla caramelizada con mantequilla de trompetas de la muerte o su curry indio. También ofrece dos menús degustación: uno vegetariano y otro vegano. O como dicen ellos: Comida sin bestias.
📍 Sant Antoni Abat, 52
4. Teresa Carles, cocina tradicional… vegetariana
Aunque la cocina vegetariana es algo relativamente nuevo en Occidente, hay restaurante como el Teresa Carles que se han conseguido repensar la tradición para adaptarla a esta nueva tendencia. El local, abierto desde 2011, hace algo a medio camino entre la cocina creativa vegetariana y el recetario tradicional catalán, con el orgullo de hacer platos que no buscan imitar a homólogos carnívoros, si no crear nuevas categorías. Fueron pioneros en introducir productos como la kombucha o el jackfruit. Su menú, de 15 euros con todo incluido (algo menos si pasamos el postre), es un regalo en el centro de la ciudad.
📍Jovellanos, 2
5. Xavier Pellicer, la alta gastronomía color bosque
Pellicer tuvo una revelación en un momento de su vida. Después de muchos años dedicado a la cocina más tradicional en lugares Abac o Can Fabes, se dio cuenta del desgaste que sufría, y empezó a mirar otras opciones. Descubrió el ayurveda y empezó a cocinar teniendo en cuenta las energías que atraviesan el cuerpo y el bienestar. De ahí surge su cocina actual, que lo ha llevado a ganar el premio al Mejor Restaurante de Verduras del Mundo en 2018. Aquí se hace cocina creativa biodinámica, con productos eco, de proximidad y saludables: lo que el llama Healthy Kitchen.
Tiene dos propuestas, la fórmula 55 euros con platos como la espuma de hinojo con esponjoso de hinojo y brotes, y un menú degustación de 79 euros que se ofrece en sus versiones vegana, vegetariana y omvívora.
6. Fat Veggies, los fats que dejaron la carne
Fat Barbies se ha hecho un hueco en la agenda gastro de Barcelona con sus carnes a la brasa, tanto que han decidido parir un hermano pequeño y vegetariano. El Fat Veggies hace lo mismo que su hermano mayor pero con la carne vetada en la entrada. Tienen un menú degustación de 30 euros, pero también se puede ir a carta pidiendo tapas y platos que exploran combinaciones muy interesantes y complejas gracias al humo de la brasa: galettes de puerro pecorino, una coliflor en tres cocciones o unos espárragos a la brasa con emulsión escabechada. Comida vegetariana tratada comme il faut.
📍 Paris, 168.
7. Cat Bar, el burguer bar vegano
Aún recuerdo la sorpresa de entrar a un bar de birras nuevo al lado de plaza Sant Jaume con aspecto punk y encontrar solo extrañas hamburguesas sin carne en la carta. El concepto era nuevo, y por tanto sorprendente, pero Cat Bar ha sobrevivido, siendo uno de los primeros en ofrecer algo tan común como una hamburguesa y una birra pero en su versión vegetariana. Aparte de las burguers, las verdaderas protagonistas son las cervezas, con variedad de marcas artesanales catalanas y la mítica birra punk escocesa Brew Dog a la cabeza.
📍 Bòria, 17
8. Virens, cocina vegetariana con estrella Michelin
Virens es el restaurante barcelonés del chef con estrella Michelin Rodrigo de la Calle, que se situó hace poco en el puesto nº22 de la lista de los 100 mejores restaurantes vegetarianos del mundo. Su restaurante es auténtica fantasía, con menús completamente vegetarianos (pero con opciones flexitarianas) que hacen olvidar cualquier proteína animal y nos descubren toda la magia que se puede hacer con una simple zanahoria.
📍Gran Via de les Corts Catalanes, 619, L’Eixample, 08007 Barcelona
9. Pötstot
La gastronomía catalana, tan rica como está, tiene un pequeño hándicap: no está muy pensaba para veganos. Desde el fricandó hasta els peus de porc, pasando por un trinxat con cansalada, una butifarra, un arroz con marisco… La comida catalana es deliciosa, pero algo restrictiva para quien no coma productos derivados de los animales.
Con el gluten lo mismo. Desde una picada con pan seco al omnipresente pa amb tomaquet el menú para los celíacos se reduce. Escalivada, bravas… y ya para de contar. De ahí que nazcan sitios como Pöstot, un sitio de cocina catalana vegana y sin gluten que es agua bendita para aquellxs que, ya sea por decisión propia o por prescripción médica, tienen que mirarse las cartas con lupa antes de pedir.
¿Pueden existir el fricandó, els canelons, el trinxat o una ensaladilla rusa vegana? Aquí parecen decir que sí, y ante la sencillez de dar sabor con una carne, un pesscado o un huevo, Pötstot revela un abanico de técnicas para crear platos veganos y sin gluten que hacen olvidar, o al menos no añorar, a sus originales carnívoros.
C/ de València, 204
20-30€
10. Mad Mad Vegan
Mad Mad Vegan es un recién llegado a la ciudad, pero sus éxitos anteriores en la capital nos han llevado a probarlo tan pronto como hemos podido. Sus hamburguesas son jugosas, tiernas y abundantes, y lo mejor es que su tamaño, pan y combinaciones de ingredientes te permiten comerla de forma cómoda y sin que morderla suponga un reto (algo que, en el mundo de las burguers, se agradece).
Entrantes de lo más variados, como buffalo wings de coliflor o ‘calamares’ fritos con alioli, unas patatas fritas de acompañamiento que para nada pasan desapercibidas y una selección de cervezas y kombuchas propias. Vamos, un banquete de fast food veggie que no puedes perderte.
Estos son algunos de los mejores restaurantes vegetarianos de Barcelona para hartarnos de comer verde. Evidentemente no son los únicos así que, si quieres recomendarnos algún otro secreto vegetariano de la ciudad estaremos encantados de escucharlo.